Descendían por el río sin nombre, a pocas leguas del salto. Comandaba la expedición don Alvar Núñez Cabeza de Vaca, que nació y falleció con la elegida fortuna de los buenos sitios. Vio su primera luz en Jerez de la Frontera en 1490, y se entregó a las sombras en Sevilla, en 1559. Entre su vida y su muerte, años de gloriosas expediciones y descubrimientos. Y descendían por un río sin nombre, cuando oyeron el estruendo de unas cataratas. “El río da un salto por unas peñas abajo muy altas, y da el agua en lo bajo de la tierra tan grande golpe que de muy lejos se oye; y la espuma del agua, como cae con tanta fuerza, sube en lo alto dos lanzadas o más”. Habían descubierto las cataratas del Iguazú, que bautizaron “Saltos de Santa María”. El cristianismo y la devoción a la Virgen siempre presente en los españoles. Como Francisco de Orellana, que bautizó al Amazonas como “Santa María de la Mar Dulce”. Eran unos tíos, aquellos antepasados.
Ese salto terrible se llama hoy “La Garganta del Diablo”. Y en torno a la Garganta caen decenas de saltos de agua en uno de los paisajes más asombrosos del continente americano. Al norte, el Iguazú brasileño; al sur, el argentino. Hacia el Oeste, a muy pocos kilómetros, Paraguay, con sus misiones jesuitas. Tuve el privilegio de llegar hasta allí con la expedición “La Ruta Quetzal” al mando del capitán, descubridor, navegante y humanista Miguel De la Quadra-Salcedo y Gayarre. Selva subtropical. Uno de los guías guaraníes, nos informó...
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One Reply to “NUESTROS AYERES”
Dice la letra de una canción de Carlos Cano: «……… si en vez de ser pajaritos fuéramos tigres Bengala haber quien sería el bonito de meternos en una jaula………».
Lo malo es que somos pajaritos y si nos descuidamos,- tal como van y se ven las cosas en España y medio mundo,- con las alas desplumadas. Que miren y pregunten por esa Hispano América de nuestros desvelos. Fíjense en lo que está pasando en Perú y ni te cuento, demasiado extenso, en el resto.
Por el contrario, vaya ejemplo para los mindundis y sinvergüenzas socialistas/ comunistas españoles lo sucedido en Portugal. Se demuestra, prueban los portugueses con sus votos en las últimas elecciones, que ,incluso, se puede ser socialista, apear a los nefastos y radicales comunistas de su entorno, y no ser unos sinvergüenzas como los que por aquí pululan y pactan hasta con el diablo en beneficio propio. Todo un ejercicio de responsabilidad y madurez, una prueba de sensatez evidente, el que ha practicado y nos ha dado Portugal; incluso con un gobierno de izquierdas, que en estos momentos, con la deriva de las izquierdas, ya es decir mucho.
Podía aprender nuestro «pernales» particular. Pero este presindentillo que tenemos no aprende ni a copiar, como ya demostró con su tesis doctoral; a este lo que se le da de narices es hacer el zafio y el ridículo cada vez que abre la boca e intenta, sin conseguirlo, apuntarse un tanto. La ultima, la de la cartita europea de ayer, es de cuento al amor de la lumbre.
Mis antepasados estuvieron por las ESPAÑAS del otro lado del Atlántico . Tuvieron aciertos, fundaron ciudades y conventos, y también se equivocaron, ganaron unas veces y perdieron otras. Me consta que intentaron hacer lo que creyeron, en esos momentos, era lo mejor para España en su inmenso conjunto y para su Rey; al que siempre fueron leales.
La diferencia con lo que hoy sucede es, como he dicho otras veces, para no echar gota. Así que el tal Sánchez, indigno sujeto donde los haya, no va a saludar al Rey Juan Carlos, en su viajecito de postureo por los emiratos. Claro, clarísimo.
Bien por otro lado, eso que se evita el Rey, mientras menos momentos desagradables, mejor; no está uno ya, a estas alturas de la vida, para aguantar a cualquier jarramantas que aparezca. Mis felicitaciones Majestad.
Y que no se me olvide, mi mayor felicitación para RAFA NADAL, otro, y cada día mas excepcional, grandísimo español. Que cunda su ejemplo de excelencia, sacrificio, esfuerzo y buen hacer dentro y fuera de las pista, tanto en el éxito como en la decepción, que nunca fracaso. Increíble su merito, le deseo muchos años así. Nos hacen falta en España él y, a ser posible, muchos que sigan su ejemplo. Pedir políticos con esa talla, comprendo que es pedir demasiado, pero…. por qué no, podría darse el milagro. Esperémoslo. Yo ya estoy sentado y esperando. Tengo, aún, fe.