Hace unos días asistimos a una farsa. Un diputado –y número 3-, del Partido Popular, en pleno padecimiento de una gastroenteritis, “se equivocaba” con el voto y aprobaba la Reforma Laboral de Yolanda Díaz y Sánchez. Tumulto en el Congreso. Una escenificación magistral. Para colmo, el rostro y la expresión del autor del fallo justificaban de por sí la posibilidad de la equivocación. Pero no. Los acontecimientos acaecidos hoy 17 de febrero, nos hacen ver que no se trató de una equivocación. Se cumplió un pacto a espaldas de los millones de votantes del PP.
Hace unos días asistimos a la segunda función del guiñol. En Castilla Y León, el PP ganó las elecciones perdiendo cincuenta mil votos. Se quedó muy lejos de la prometida mayoría absoluta. Pero con la posibilidad natural de gobernar con los escaños de Vox, que ganó once y recibió 120.000 votos más que en las últimas elecciones de 2019. Pero Casado, el que cumplió con el pacto de la Reforma Laboral, impidió que su muñeco Mañueco confirmara lo que todos esperábamos. Que el PP y Vox gobernarían Castilla y León. Casado y Teo, los que mueven los hilos del guiñol, repudiaron a Vox siguiendo las órdenes de Pedro Sánchez....
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6 Replies to “EL GUIÑOL”
Con este panorama, la confianza en el PP es ninguna. Da lo mismo que sean traidores o simplemente tontos porque en uno u otro caso son perfectamente inútiles. Sorprendente el paralelismo con el diputado de Trujillo, que tampoco ha llegado a saberse si traicionó o simplemente no sabe distinguir entre los botones del voto telemático. También en uno u otro caso lo hacen necesariamente prescindible.
Primero Cayetana A de T y ahora Ayuso. Está clarísima cuál es la deriva capta-votos que el PP ha escogido y cuál a la que ha renunciado. Vox ocupará ese espacio.
Una barbaridad, el PP con dos mediocres al frente se ha suicidado . Sànchez no pudo conseguir Madrid pero me temo que lo conseguirà con la ayuda de éstos dos inútiles que han dejado a millones de españoles de bien, entre los que me encuentro, huèrfanos de apoyo político.
Tanto Egea como Casado no dimitiràn, salvo que el clamor popular sea de una intensidad salvaje, lo que no va a ocurrir, por desgracia en éste campo nos gana la izquierda, no estamos acostumbrados ni a quemar contenedores ni a boicotear las carreteras ( una pena , por una vez en mi vida lamento la educaciòn que me han dado.
Y para guinda….el anuncio del PSOE en orden a denunciar ante la Fiscalía la corrupciòn de Ayuso ( ni siquiera se molestan en indicar que podrìa ser » supuesta corrupciòn » ) Y ¿ quien es la Fiscalía? preguntó el sàtrapa español al periodista……pues eso.
Señor, qué cruz
Mal panorama. Ese dúo, Pepe Goteras y Otilio la han armado buena. Pero sinceramente, con la jeta que tienen los dos, dudo que dimitan, vamos, apuesto a que no, y el hundimiento del PP va a ser memorable. Es imposible hacerlo peor si no es a propósito, y desde luego tiene toda la pinta de que lo es, y de que quién manda en Casado es Sánchez. Yo hace tiempo que lo vengo sospechando.
Tenemos Sánchez para rato.
Estoy parcialmente de acuerdo con lo que dice. Los complejos, la cobardía y la hesitación que adornan al timorato Casado son indubitables. Un personaje que está a años luz de aquella promesa surgida del Congreso Popular de julio de 2018, y que, a lo largo del poco tiempo transcurrido, ha demostrado que todas las expectativas tejidas en torno a su persona no eran más que puro espejismo. Que de la evidente debilidad de Casado se esté aprovechando Sánchez, que es un tipo ladino, amoral y sin complejos, no me cabe la menor duda; pero, lo que no me parece creíble, por principios, es que haya una connivencia entre ambos. Ya se sabe que, por la cobardía y falta de convicción de la derecha en su credo, la izquierda se ha aprovechado para erigirse como poseedora de la autoridad moral y la capacidad para decidir entre lo que es políticamente correcto y lo que no. Un ejemplo claro lo tenemos con VOX y toda la escoria que sostiene a Sánchez en La Moncloa. El PSOE, junto con sus socios, han decidido proclamar que VOX es la «ultra extrema derecha» y «un peligro para la democracia», algo que hay que combatir, e incluso llegan al extremo de hablar de «ilegalización». ¡INSUPERBLE! En cambio BILDU (formado por la cúpula etarra, cargados de sangre inocente); Podemos (representantes del comunismo más extremo) y el separatismo catalán, todos declarados enemigos del Estado de derecho que ampara la Constitución del 78, y que, públicamente, sin ambages, han manifestado que les importa una higa y que han venido para romperla y dinamitar la unidad de España, «son demócratas de toda la vida». ¡INCREIBLE! Esta mercancía envenenada y podrida, una trampa urdida para evitar que la unión de la derecha pueda poner en peligro el absolutismo de Sánchez, es la que está comprando el PP de Casado. Así de claro y sencillo.
En cualquier caso, sin necesidad de consultar al Oráculo de Delfos, ni tener la suficiente capacidad de criptestesia para resolver la conjetura de Collatz, se puede aventurar que, de los problemas que actualmente acucian al PP: la encrucijada para la formación de gobierno en Castilla y León, y el affaire recientemente surgido en la Comunidad de Madrid con Ayuso, larvado desde la antinomia que la presidente madrileña sostiene con Casado y el secretario general del partido, Egea, el máximo culpable es precisamente este último. Egea es una persona ambiciosa, poco fiable, experto en cabildeo, fabricante de conspiraciones, y que, sin duda, compite en mendacidad con el mismísimo Sánchez. Casado, con el error de entregar prácticamente todos los resortes del poder en el PP a Egea, se ha convertido en un rehén de este sujeto, quien lo maneja igual que un muñeco de guiñol. Cuando se está en el poder es imprescindible rodearse de los mejores, formar un equipo fiable y comprometido con el líder con el objeto de generar la sinergia necesaria para el mejor desempeño de la misión encomendada. Casado, en este sentido, ha cometido un error de bulto, y, por ende, en el pecado llevará la penitencia.
No puedo columbrar la salida que el PP tendrá a todo el embrollo en el que está inmerso; pero, lo que sí estoy seguro, es que si el “charrán” que figura en su logo quiere levantar el vuelo, necesitará una nueva refundación. De esta saldrá muy tocado y la actual cúpula directiva del partido inhabilitada para continuar gobernando la nave. Por el contrario, Isabel Díaz Ayuso, si sale incólume de esta batalla, podrá ser la nueva figura emergente con aspiraciones fundadas de alcanzar la presidencia de los populares. Parece una persona capaz y circunspecta, algo no muy abundante en política.
Sit fortuna vobiscum.
Las carcajadas desde la Moncloa de Sanchez se oyeron hasta en Pernambuco. Este impresentable comunista disfrazado ha conseguido de nuevo desviar la atención de todos. Es el más listo de los políticos domésticos y conseguirá por supuesto romper España. Al tiempo.
¿Qué pasaría si Cayetana Alvarez de Toledo, Isabel Ayuso y Olona formasen un nuevo partido en España ?