Dedico todas las mañanas a leer y escribir. Desde las 7.30 a las 13 horas. Las tardes las reservo a practicar deportes de riesgo. Acompaño a las hijas pequeñas –14 años-, de Montse y Ricardo Escalante a lanzarme, Camaleño hacia Potes en la tirolina de Liébana. Lo he pasado mal en alguna ocasión. Y con Adolfo y Raúl Herrera, me trago los carriles del Monte Corona en los “Quads” que nos presta nuestro común amigo Luis Moreno de Cala. Los días de nortazo loco y fuerte oleaje, practico el “surf” con mi mujer, que me aventaja en habilidades sobre la tabla. Pero ayer –comenzó ayer y terminó hoy-, a pesar de que el cuerpo me pide tralla, he permanecido sin moverme –como si fuera Alberto Garzón-, de mi casa para seguir el tenis de París, el Rolland Garros. Carlitos ha perdido con todos los honores y entre las mayores ovaciones con Sacha Zverev, que ha jugado como el que inventó el tenis. Y Rafa Nadal, se ha cepillado en cuatro sets impresionantes a Novak Djokovic, el número uno del mundo. Ni agujetas ni....
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One Reply to “CATORCE”
Se llama «Tómbola», no «La vida es una tómbola». Y no es una película mala. Es una buena película.