RECUERDO MANDARINO

La que más aplaudiera la belleza de mi escorzo muelle se quedaría con mis sístoles y diástoles....

Un viejo y estupendo amigo de mi juventud donostiarra me ha enviado un paquete. Dentro del gran sobre, una tarjeta y un traje de baño color mandarina. Transcribo el texto.

“Querido Alfonso. Hace quince días pasé a Francia, a merendar en el “Dodin” de Biarritz. Los de Bilbao dirán que son lo que no son, pero no tienen un “ Dodin” a 30 minutos de San Sebastián. Al abandonar el templo del “Chocolat a la Créme” pasé por una tienda en cuyo escaparate destacaba un traje de baño naranja fuerte, mandarina. Recuerdo cuando te lanzaste desde la palanca de la piscina del Tenis con aquel traje de baño color mandarina que se convirtió en una de las imágenes inolvidables de nuestra juventud. Sé que has hermoseado un poco de estómago, pero....

 

Para seguir leyendo el artículo de Alfonso Ussía hay que estar Suscrito.

Elige el modelo de suscripción que prefieras o, si ya formas parte del Club Alfonso Ussía, accede a tu cuenta:

 

Contenido privado

Entra o suscríbete ahora

Comparte:

Compartir en facebook
Facebook
Compartir en twitter
Twitter
Compartir en linkedin
LinkedIn

4 Replies to “RECUERDO MANDARINO”

  1. Francisco Javier Mancha Monago dice:

    Hilarante! Me parto de la risa.
    Todos los artículos, a cual mejor.
    Cuanta fecundidad!

  2. Francha Menayo y Domingo dice:

    Genal relato y como siempre se supera un saludo

  3. Carmen Basarán Conde dice:

    Si hubiera estado en una de esas tumbonas del tenis le hubiera aplaudido a usted hasta dejarme las palmas de las manos como pimientos morrones….las de tanto apellido vasco es lo que tienen…aprecian más la genealogía euskaldún que la belleza de un Apolo pegándose una buena panzada….qué lástima que mis veraneos eran más de rastrojo y tábanos.
    Muy bueno y divertido…como siempre.

  4. Marta Echeverria Ezcurdia dice:

    Querido Alfonso: no debes sufrir porque una niñas distraídas, no prestaran atencion al muy famoso salto del angel, primer premio del año 63. Yo presencie como Esther Williams que andaba por la piscina del tenis, quiso lanzarse al agua para abrazarte; incluso pedirte que le dieses unas clases de salto del trampolín. Y no pudo realizar su sueño de entablar contigo una relación acuatico-amorosa.
    P.D
    El traje de baño no era color mandarina era fucsia y talla XL porque en el aire se deslizo ligeramente…….

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Otros artículos destacados

Alfonso Ussía

¡Ser normal no es nada fácil!

Sígueme en Twitter

PÁGINAS

ÚLTIMOS ARTÍCULOS

CONTACTO